Como se desata?. La solución, viene siempre por el lado menos pensado?.
Y porque será que repetimos siempre lo que nos hace mal?. Será que somos masoquistas?.
Uno quiere cambiar algo. Justo eso que se repite y se repite quiere cambiar.
El problema quizás es: querer cambiar lo que no se puede cambiar.
Un camino para la solución del nudo gordiano puede ser aceptar las cosas que no se pueden cambiar y lo que sí, cambiarlo, pero con paciencia. No hay que ser tan exigente con uno mismo.
A veces nos sentimos atraídos por repetir eso, justamente eso, aunque sabemos que es un error. O a veces lo hacemos inconscientemente; simplemente no nos damos cuenta que estamos repitiendo eso que tanto mal nos hace. Si no tomamos conciencia de que estamos repitiendo algo que nos hace mal, nunca vamos a poder cambiarlo.
La vida es una secuencia de repeticiones, y de vez en cuando algo distinto.
Uno vive enredado en un nudo, atrapado, sin poder salir. Más tirás de esa soga, más se cierra el nudo; parece que cuanto más insistís en lo mismo, menos solución le encontrás. Es como un laberinto, que te sentís que estas yendo siempre por el mismo lugar, y aunque te esfuerces en encontrar otro camino que elegir, siempre decidís inconscientemente tomar el mismo, y ves cada vez más lejos la salida.
Pero cuando menos lo esperas aparece algo distinto. Algo inesperado que te cambia la vida. Se abre el nudo. Encontrás la solución. Llegas a la salida del laberinto. Pero así, justamente de manera INESPERADA. Cuanto menos lo buscás.

1 comentario:
Es que uno muchas veces sólo puede ver una manera... y pasa el tiempo frustrado, encerrado en ese accionar, en lo que cree que está bien, o no puede evitar hacer. Hasta que finalmente se da cuenta que en las mismas situaciones, mismas acciones no nos llevan a distintos puertos...
Y es que en la vida, es un poco de eso, un poco de suerte. Del milagro ineperado, que como todo va y viene, un día te lo da y un día de lo saca. Pero te cambia todo.
Uno mismo, perseverando y con la esperanza hacia adelante, puede llegar lejos.
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